Asunto este tan mundano como práctico. ¿Compro una trona? ¿Qué trona me compro?
Cuándo nació mi primera hija, hace ahora casi 9 años, ninguna trona era barata. Mil posiciones, regulables en altura y convertibles, para justificar unos precios, en la mayoría de casos, desorbitados.
La mayoría de tronas, armatostes, seguramente están diseñadas para tener al bebé largas horas allí sentado, incluso durmiendo, ya que las hay reclinables.
Las ventajas de la Trona de Ikea
El paso del tiempo y la experiencia me han obligado a definirme.
Después de probar varias, la mía propia y otras en diferentes sitios, la trona que más me gusta es la trona Antilop de Ikea, porque es una trona ligera, que se guarda fácilmente, que vale poco dinero y que tiene una bandeja fácilmente desmontable, que podremos lavar fácilmente después de las comidas.
Incluso, podemos utilizar la bandeja como plato, o dejar algunos alimentos en ella mientras nosotros le ofrecemos otros.
Porque es importante que el niño se familiarice con la comida, que juegue con ella y que no sea un comedor pasivo. Que pruebe distintos sabores, texturas, que se manche la cara y las manos. Es importante que disfrute comiendo.
Los inconvenientes:
Hay gente que se queja de que te puedes tropezar con las patas de la trona, pero para mi gusto esto se debe a que el asiento es un asiento pequeño y sencillo, y que el resto de tronas tiene bases similares, pero el tropiezo se evita por las grandes dimensiones del asiento y de la trona en general, que hace que sea más visible.
Como inconveniente, que no es un trona que sirva mucho tiempo, ya que el espacio para meter las piernas no es muy grande. Tampoco quiero yo que le sirva más allá de los dos años porque prefiero que entonces use una silla alta de la que pueda subir y bajar por sí mismo.
No es reclinable ni evolutiva, por lo que el bebé no se podrá dormir en ella, pero esto tampoco es un inconveniente para mí.
Tanto me gusta esta trona que la tuve y no sé lo que hemos hecho con ella, pero no voy a dudar en volver a comprarla.
¿Qué opináis vosotros?
Mi experiencia es diferente:
Yo tengo una silla-trona evolutiva sin bandeja, que es la mejor compra de trasterío infantil y la más amortizada. Mi hija (7 años) se sentó a la mesa con nosotros desde el principio, y luego la siguió usando (es ajustable) hasta que llegó su hermano que tiene 9 meses.
Ahora es él quien guarrea en la mesa sentado en la silla, y la usará por unos años más. En total serán 14 o más años de uso intensivo… Costó unos 120 euros en su día, ¡pero los considero muy bien gastados!
Un saludo.
Gracias por compartir tu experiencia!
Yo tengo una stokke y otra e imitación. Me gusta más la segunda porque aunque la madera no es de la misma calidad, la silla es más ligera. Las uso sin bandeja simplemente como una silla más, pegadita a la mesa. Y tengo dos porque el mayor de 6 años se la ajusta a su altura y come mucho más cómodo que en las sillas “de adulto”. En amazon, la de imitación no me salió nada cara.
Gracias por comentar, Jara. Un abrazo.